Frente a las seis mil calculadas por el Partido de El Bierzo, la Junta de Castilla y León ha cifrado en 3.300 las hectáreas perdidas en los 16 incendios forestales que se han producido recientemente en la comarca del Bierzo. La mayor parte es monte bajo, según los datos aportados este miércoles por el delegado territorial del gobierno autonómico en León, Eduardo Fernández, y de arbolado únicamente se habrían visto afectadas alrededor de 150 hectáreas. El municipio más castigado por el fuego ha sido Peranzanes, donde ardieron unas 2.000 hectáreas. Durante estos días se realizaron 139 intervenciones, entre las que se incluyen 53 de los medios de la Junta en la comarca, 31 de León, 26 del resto de la comunidad autónoma, junto a 22 del Ejecutivo Central y 7 de la UME. A esto se añade los casi 700 efectivos de la Junta que estuvieron combatiendo los incendios.

Sobre el origen de los incendios, Fernández aseguró que, a excepción de algunos originados de forma accidental junto a las vías del tren, “como en los de Torre del Bierzo”, el resto “no cabe ninguna duda que han sido intencionados, dolosos, ya que cuando el mismo incendio se prende dos o tres veces, en dos kilómetros y cuando se está apagando uno o incluso cuando se han retirado los medios, no cabe duda que eso ha sido intencionado”. No obstante aseguró en una rueda de prensa que “hay que ser prudentes y confiar en que la Guardia Civil o la administración avance en su investigación”.

El delegado territorial también destacó la “labor preventiva” de la Junta de Castilla y León asegurando que “de cada tres euros que se gasta en el dispositivo antiincendios, uno es para la extinción y dos para la prevención”. Según explicó, en El Bierzo se realizan tratamientos directos contra el fuego “consistentes en podas, clareos y desbroces, de hecho este invierno se desbrozaron dos mil hectáreas, algo que se hace cada año en la comarca”.