EL OBSERVADOR PARCIAL | Parece que una vez más se va a cumplir ese dicho popular que enfrenta meteorológicamente a las fiestas de Cuatrovientos y Flores del Sil. Con todo y con ello, no albergamos duda alguno respecto a la presencia masiva de nuestros políticos en la procesión del domingo. Ir a tantas misas deber ser para pedir clemencia para el día del juicio final, además de para intentar arrancar unos votos.

Nuestra simpar Alcaldesa acudió a Santiago a verse con el sucesor de Rajoy. Le acompañaba en las fotos el Presidente del Consejo Comarcal del Bierzo, que últimamente no pierde oportunidad para autopromocionarse. Nos dice nuestro hostelero amigo que ya ha deshojado la margarita y que, finalmente, sí va a presentar su candidatura a la Secretaría Comarcal de su partido. Aproximadamente a la misma hora se estaba decidiendo priorizar las inversiones en el eje ferroviario Zamora-Ourense-Lugo, desluciendo una foto que cada uno intentaba vender en su propio beneficio.

Y también nos hemos enterado por doña Gloria que las hordas asiáticas parece que se van a unir a lusos y vikingos en esa invasión multiétnica de la que vamos a ser objeto los bercianos. Parece mentira que con tantas buenas noticias que nos da la señora Merayo, Ponferrada y el Bierzo sigan inmersos en plena decadencia, y no sólo económica, también intelectual y de valores. La mediocridad se ha apoderado de las instituciones y sus interinos ocupantes que por no tener, no tienen ni gracia.

No sabemos si forma parte de esa mediocridad, pero la batalla dialéctica entre nuestro exregidor y el exregidor torenense ha ido in crescendo. La referencia que hizo el tío Sam a la gestión del político sexagenario en el Ayuntamiento minero le va a costar muy cara. Al líder antorchado le espera un marcaje a lo Goikoetxea en el año que resta de mandato y no nos va a faltar salsa bercianista para aderezar la planitud de los plenos municipales. Y todo ello bajo la magistral dirección de una directora de orquesta que no conoce las notas musicales.

Los vecinos de Compostilla vuelven a la carga contra la nanoforestalia con la que les obsequiaron el líder usista (nos dice nuestro orondo hostelero que él fue quien decidió su ubicación) y doña Gloria, que ha bendecido en proyecto sin recato alguno. Les cambió tres millones de euros de inversión en el barrio por una fuente de contaminación que seguramente no será tan perniciosa como denuncian algunos, pero que es seguro que no va a mejorar la salud medioambiental del barrio. Claro que, como dijo nuestra Alcaldesa, soportaron las emisiones de Compostilla y ahora se quejan por unos hilitos de humo.

Lo que ya parece que se ha explicado es el doctorado de la Presidenta Local del PP. Se debió a un error. Está trabajando en ese doctorado aunque obtener, lo que se dice obtener, todavía no lo ha obtenido. Algunos dolores de cabeza se habrían evitado si esa explicación, creíble o no, se hubiera dado desde el principio. No está bien que un responsable público diga, pongamos por caso, que es auditor o un empresario con altas responsabilidades internacionales o, incluso, administrativo si no lo es. Estaría feo, la verdad.

Y ya para terminar: a nuestro amigo le ha sorprendido la reacción furibunda de la señora Luna a la propuesta socialista de rebajar el IBI. Nos dice que Ciudadanos no anda sobrado de coherencia, y menos aún quien con una mano fustiga en no pocas ocasiones a la señora Merayo y con la otra recoge los más de veinte mil euros que  la voceira naranja recibe anualmente por el cargo que la propia fustigada le otorgó al frente del IMFE.