PEDRO BLANCO | Que la salida de este domingo es importante no lo duda nadie. No puede ser decisiva cuando faltan muchas jornadas de Liga por delante y porque enfrente está uno de los equipos que luchan por lo mismo que los bercianos y se juega en su terreno.

Ya veremos si la hierba artificial es un problema añadido o ya después de jugar tantas veces sobre este tipo de terreno los jugadores no encuentran tantas diferencias como hace años, cuando eran casi inexistentes. Luego está que en caso de derrota la disculpa es fácil encontrarla. Pero yo espero que no ocurra ninguna de las dos cosas. Ni disculpa ni derrota.

Aunque donde tengo más dudas es en el rendimiento del equipo. Si se confirma esa mejoría de actitud que se vio en el campo del Guijuelo, donde también el terreno de juego es similar y en campo ajeno. Porque la prueba del Fabril se puede decir que no había algodón ni era necesario. En San Sebastián de los Reyes habrá que poner mucho para sacar un buen resultado. En El Toralín se ganó por 3-1 con un partidazo de Dani Pichín y como no con la colaboración de Yuri que inauguraba el marcador.

No voy a incidir en este momento, cuando hay tantos puntos por jugarse, que el golaverage pudiera ser importante al final, pero sí que debe ser considerado como una posibilidad. No encajar goles ya seria un punto a favor. Y esta Ponferradina puede hacerlo si el trabajo es uniforme por parte de todos. Con la inclusión de Larrea como nueva aportación, más el reencuentro de Matthieu reforzando la medular el equipo, ha ganado en consistencia y ya es posible que debute Guille en la punta derecha. Si estas incorporaciones al equipo consiguen hacerse con la titularidad, premio a su buen trabajo, se habrá ganado mucho de cara a conseguir el objetivo.

Parece que se consolida el meta Gazzaniga y sus escuderos defensivos, quedando a la expectativa Trigueros como quinto hombre. De ellos va a depender que el rival no encuentre los huecos necesarios y sobre todo que no se caiga en los errores de anteriores partidos. A este respecto me ha sorprendido la declaración del guardameta argentino, que con gran desenfado admite que en el transcurso de la temporada suele tener algún que otro error garrafal, como el que tuvo en Guijuelo, pero que no espera vuelva a suceder, cuando menos en la segunda vuelta.

Vamos, que ha cubierto ya el cupo de fallos. El resto de la formación dependerá de lo que Bolo sepa del rival, sus puntos fuertes y débiles y por donde puede neutralizarlos. Hay que recordar que el Sanse se enfrentó la pasada jornada al líder en su campo y le fue ganando hasta el tiempo extra, empatando por un estrafalario penalty en el último lanzamiento de saque de esquina, jugada en la que son bastante peligrosos los madrileños. También hay que decir que los rivales de la Deportiva este domingo marcaron su gol en un estrepitoso fallo del meta fuenlabreño, que en un balón sin peligro lo metió en su portería.  Así que hasta Gazzaniga tiene admiradores por ahí...