Sostiene el politólogo Pablo Simón en su libro Votar en tiempos de la Gran Recesión que "si cada ciudadano hiciera un cálculo individual sobre si es racional o no votar, la gente se abstendría masivamente". Bueno, la verdad es que lo visto y oído en las campañas tampoco anima mucho a acercarse a las urnas.

Para muestra, el vodevil de Vox en Ponferrada. Algunos todavía no se lo creían y seguro que contribuyeron a petar a primera hora de la mañana la web de la Diputación que aloja el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), donde se publican los listados oficiales de candidatos de la Junta Electoral de Zona. En su vida registró tantas visitas. Los únicos que se olvidaron de entrar fueron los de El País, por eso ayer mismo todavía estaban con que El portavoz de la fundación Franco tutela las listas de Vox León. Eso sí, seguimos esperando una explicación del partido de Abascal a este despropósito.

Más dislates. ¿Se acuerdan de aquello de Samuel Folgueral confirma 10 candidaturas cerradas en el Bierzo para las municipales? Bueno, pues al final han sido dos y gracias. O sea, que se ha confirmado el fiasco que pronosticamos en Vuelve la Antorcha Humana (ahora también comarcal). Era tan cierto como el porcentaje de financiación privada del eventísimo o los millones de personas que lo iban a seguir en vivo y en directo. El patético hombrecillo ha situado en el número 2 a Cristina López Voces, movimiento con el que pretende asegurarse el apoyo de Ismael Álvarez. La buena noticia es que el flamante candidato a procurador Santiago Macías se mantiene en el número 5. Adiós, Narciso, adiós.

La buena noticia es que el flamante candidato a procurador se mantiene en el número 5. Adiós, Narciso

Otro al que ya le vale es Javier Arias, capaz de declarar sin despeinarse que "IU es la única lista de izquierda en Ponferrada". Lo dice alguien que va en la candidatura para el Senado en coalición con otra fuerza que no sabemos si para él será de derechas, de centro o extraterrestre. Haría mejor en preocuparse de comprobar si alguno de los que le acompañan infringen con su actividad partidaria los estatutos del BAS. Ya que hablamos de presuntos incumplimientos: USE, PRB, IU de Cacabelos y la agrupación impulsada por el alcalde de la villa —sigue en el aire la posible impugnación de su lista, veremos lo que dice hoy Adolfo Canedo en su rueda de prensa— deberían repasar la ley de paridad. Hay que cumplir el porcentaje en el total (suplentes incluidos) y en cada uno de los tramos (el de suplentes incluido). Parece que algunos se siguen haciendo un lío con esto.

Ha llamado la atención el Golpe de Rivera al PP: el expresidente Garrido ficha por Cs como número 13 para Madrid, pero por aquí también se comenta el caso de La exconcejala popular Teresa García Magaz, número dos de Ciudadanos, haciendo el camino inverso al emprendido por Rosa Luna y desplazando a Ruth Santín, que no estará precisamente contenta. Hay otros fichajes curiosos de color naranja, como los tres de Bembibre o el de Jacobo Canedo en Camponaraya. En cambio, otros hijos de alcaldes han decidido permanecer fieles a las siglas de sus padres como Jesús Esteban o Ricardo Fernández. Bueno, en el caso de este último ha sido fiel al padre que fue alcalde socialista, no al que posteriormente se pasó al PP.

Si tienen mono de encuestas, en estos días en que están absurdamente prohibidas, les recomendamos una visita diaria al #EmojiPanel. Hay quien dice que Sánchez perdió medio millón de apoyos en los debates en beneficio de Rivera e Iglesias. Otros, en cambio, sostienen que no hubo grandes errores por parte de ninguno de los contendientes y que en esas circunstancias se impone la norma general: los debates mueven pocos votos. Parece claro, según todas las encuestas, que el PSOE será el más votado y el PP el segundo. Para la tercera plaza se aprieta la lucha, pero Ciudadanos parece tenerla asegurada. La gran incógnita ahora mismo sería un posible, aunque improbable, sorpasso de Vox a Podemos.

Una reflexión para el fin de semana, dedicada a los amigos de las banderas y el 155: La absolución de Sandro Rosell tras 643 días encarcelado reabre el debate sobre el abuso de la prisión preventiva.