Merayo intenta enfrentar a la oposición con los funcionarios por los presupuestos Imprimir
Jueves 28 de Junio de 2018 10:58

Gloria Merayo y Roberto Mendo, este jueves en La Rosaleda / BierzoDiarioGloria Merayo y Roberto Mendo, este jueves en La Rosaleda / BierzoDiarioLa alcaldesa de Ponferrada advierte al resto de los grupos municipales de que el acuerdo sobre plantilla de personal alcanzado con los sindicatos por la anterior delegada de Hacienda no podrá aprobrarse si las cuentas del 2018 no salen adelante.

En la partida de ajedrez que se está librando en el Ayuntamiento de Ponferrada en torno a los presupuestos de 2018, Gloria Fernández Merayo hizo este jueves un nuevo movimiento que, no por esperado, ha dejado de ser interpretado por los partidos de la oposición como un intento de meterles presión.

La regidora les advirtió de que la aplicación del acuerdo sobre plantilla de personal alcanzado con los sindicatos por Amparo Vidal, la concejala que dimitió el pasado 31 de mayo, depende de la aprobación de los presupuestos y esgrimió como argumento un informe de la interventora y otro del jefe del servicio de personal. Así que si no respaldan su proyecto económico "tendrán que explicárselo a los funcionarios", retó.

Fernández Merayo, a la que ayer dejaron plantada PSOE, Ciudadanos y Ponferrada en Común, no aportó información alguna acerca del resultado de sus negociaciones con USE Bierzo, la formación liderada por Samuel Folgueral que es clave para la aprobación de las cuentas. Se limitó a reiterar por enésima vez tanto el llamamiento a la "abstención responsable" como el argumento de que "si los casi 5,9 millones previstos para inversiones no se destinan a obras irán a parar a los bancos".

"Una cosa es hacer oposición y otra el boicot, cuando todos sabemos que hay cosas en las que no influye la ideología política", enfatizó la alcaldesa, que asegura ser consciente de que "algunos partidos ya tienen decidido su voto porque piensan en clave electoral más que en el interés de los ciudadanos de Ponferrada". En cualquier caso, mantiene su intención de llevar las cuentas al pleno el próximo mes de julio —"ya veremos si con el tema de la basura o aparte", apostilló— y emplazó a que "cada uno vote en conciencia y se lo explique a los ponferradinos".

 

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