Victorino Alonso aboga por una autovía que llegue hasta Villablino Imprimir
Martes 15 de Abril de 2008 12:24
El empresario minero Victorino Alonso se ha pronunciado contra la opción de aprovechar la actual carretera entre Páramo del Sil y Villablino, una vez acondicionada, en lugar de continuar hasta la villa lacianiega la autovía proyectada entre Toreno y Páramo. "La realización de esta autovía hasta Villablino supondría como empresario con intereses en la zona un apoyo para potenciar el actual tejido empresarial y un aliciente para intentar paliar el declive económico al que está condenado la comarca de Laciana con las actuales infraestructuras de comunicación de segundo orden", argumenta Alonso. En opinión del empresario, que considera "salvables" las objeciones medioambientales con la construcción de túneles, acondicionar el actual trazado entre Páramo del Sil y Villablino con la inclusión de tres variantes poblacionales "no invita a hablar de futuro y sí de seguir ahondando en la crisis socio-económica de la zona".

 

La opinión de Victorino Alonso

He tenido conocimiento de las conclusiones y trazados propuestos en el estudio informativo de la autovía Ponferrada-Villablino, tramo Toreno-Villablino, promovido por la Junta de Castilla y León, y como parte interesada al afectar este proyecto al corredor del Sil donde tienen actividad empresas que represento, caso de Minero Siderúrgica de Ponferrada, S.A., Unión Minera del Norte, S.A. y Hullas del Coto Cortés, S.A., quiero poner de manifiesto que:

1.- Así como en el primer sub-tramo Toreno-Páramo del Sil se prevé que sea autovía, en el segundo sub-tramo Páramo del Sil-Villablino se ha descartado que siga siendo carretera de alta capacidad y se plantea acondicionar la actual vía y realizar tres variantes en las localidades de Corbón, Palacios y Cuevas. Ante esto, defiendo la necesidad de que la autovía llegue a Villablino y estimo que la ponderable ‘medioambiental’ ha actuado en contra de la idoneidad de la autovía sin tener en cuenta que los impactos negativos que aduce se pueden salvar mediante la realización de túneles aprovechando el corredor de la actual carretera.

2.- La necesidad de la autovía no sólo redundaría en la actividad de las empresas mencionadas, que verían mejorada su vía de comunicación entre sí y con empresas auxiliares que prestan servicios, sino también en la seguridad y movilidad del denso tráfico pesado que trascurre por esta zona debido en gran medida al negocio del carbón que arrastran las centrales térmicas de Compostilla y Anllares.

3.- La ponderable ‘funcional’ es la que debería prevalecer o tener más peso para hacer valer la necesidad de la autovía. Además de las razones empresariales señaladas, que son cruciales, me veo también en la ‘necesidad’ de recordar que Villablino y su adscripción comarcal de Laciana es una de las cuencas mineras más importante del país y cuyo sector básico en generación de rentas arrastra un continuo adelgazamiento desde que hace 20 años se pusiera en marcha su reconversión. Si realmente queremos que los planes de reindustrialización propuestos por el Gobierno de la Nación para atraer actividades alternativas tengan algún efecto en esta ardua y complicadísima tarea no podemos escatimar esfuerzos y menos infraestructuras tan atractivas para la inversión empresarial actual y alternativa, como son las autovías. Los fondos mineros dispuestos en cantidad para este cometido tienen fecha de caducidad, son puntuales, y Villablino no puede dejar escapar esta oportunidad única de disponer de una infraestructura de primer orden. La autovía es un atractivo irrenunciable si realmente queremos abordar la reindustrialización de Laciana con ciertos visos de realidad.

En conclusión, la realización de esta autovía hasta Villablino supondría como empresario con intereses en la zona un apoyo para potenciar el actual tejido empresarial y un aliciente para intentar paliar el declive económico al que está condenado la comarca de Laciana con las actuales infraestructuras de comunicación de segundo orden. Por tanto, la opción de acondicionar el actual trazado entre Páramo del Sil y Villablino con la inclusión de tres variantes poblacionales no invita a hablar de futuro y sí de seguir ahondando en la crisis socio-económica de la zona. 

 

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