OLEGARIO RAMÓN | En Ponferrada ha llegado la hora de recuperar la gestión y la decencia. Ponferrada, antaño  bautizada como la ciudad del dólar, hoy forma parte de esa España vaciada; y luchar contra esto debe ser el objeto de nuestros desvelos.

En nuestro Ayuntamiento se perdió esa gestión y esa decencia cuando dejó de gobernarlo Celso López Gavela, pero regresará el día 26 de mayo como regresará a la Junta de Castilla y León con Luis Tudanca y como regresó al Gobierno de la nación con Pedro Sánchez el 1 de junio de 2018.

Y para afrontar ese reto tenemos al mejor equipo humano: veinticinco mujeres y hombres preparados para asumir el compromiso, para firmar un contrato con la ciudadanía, con ilusión, con conocimiento, con responsabilidad. Gente decente, gente de fiar, buena gente. Y tenemos también el proyecto para sacar a esta ciudad y sus pueblos del letargo, del abandono, de la atonía.

En ese modelo de ciudad racional, sostenible medioambientalmente, energéticamente eficiente, circular, verde, solidaria, comprometida con la igualdad de género, transparente y participativa, apostaremos por la aplicación de las nuevas tecnologías para hacer la ciudad más humana, más habitable. Aspiramos a ser un territorio realmente inteligente, con un urbanismo que piense más en las personas que en los coches, que apueste por la democratización de los espacios públicos.

La interrelación entre la ULE-Uned-Ciuden-empresariado privado- administraciones puede generar un potencial clúster/parque/sector tecnológico que genere puestos de trabajo de altísima cualificación y que aguantan con fortaleza los períodos de crisis. En un tiempo tan complejo como el que vivimos, la suma de fuerzas, la altura de miras, la implicación de la sociedad berciana en su conjunto, es una necesidad imprescindible para alcanzar el futuro.

Firmamos un contrato con el Bierzo en el que los verdaderos protagonistas serán los y las bercianas. La ciudadanía ha de ser protagonista activa de su futuro, asumiendo una parte del compromiso social que nos exige la vida en comunidad. Si queremos que nuestros hijos e hijas puedan desarrollar un proyecto de vida en nuestra comarca, todos hemos de poner nuestro granito de arena para conseguirlo.

El futuro está en las energías renovables. Y en ese camino también tenemos enormes posibilidades en la fabricación y explotación de aerogeneradores, en el aprovechamiento de la biomasa, en las placas solares. Pero también tenemos la oportunidad de no renunciar a la investigación y desarrollo de técnicas de captura en CO2, porque tenemos las instalaciones y los profesionales para hacerlo, en la Ciuden, técnicas ligadas ahora al sector industrial, no al energético.

La modernización del sector agroalimentario, la puesta en valor de la transformación y la comercialización del producto, la promoción de la agricultura ecológica, las concentraciones parcelarias, las marcas de garantía, son un potencial natural, propio, específico de nuestro territorio. El turismo es otro de nuestros sectores susceptibles de mejorar en gran medida, con su diversificación: estamos surcados por dos ríos (el Sil y el Boeza) y por un camino (el de Santiago), y vivimos de espaldas a ambos. El aprovechamiento de los bosques, los servicios de calidad y la llegada de la banda ancha son imprescindibles en nuestro medio rural.

Y el protagonismo de nuestra pirámide poblacional los tienen las personas mayores. Hoy en día, en Ponferrada, hay más de quince mil personas mayores de 65 años mientras hay solo diez mil menores de 18. Pero es que, en 2040, la población mayor de 65 años superará un tercio del total. Atender las necesidades de los mayores es una obligación ética, un compromiso generacional y también supone una fuente de oportunidades para desarrollar actividades en el tercer sector que generen muchos puestos de trabajo.

La cultura ha de estar en las líneas prioritarias de nuestra actuación, porque el conocimiento, la cultura, la generación del espíritu crítico, la creación de un tejido cultural con músculo, la osadía en la oferta cultural es también una oportunidad de negocio. Los socialistas vemos la cultura como un derecho y como un recurso.

Pero para poder desarrollar nuestro programa, nuestro modelo de ciudad, es necesaria una gran movilización colectiva. Lo que ha pasado en Andalucía podría ocurrir en nuestro Gobierno central, en la Junta de Castilla y León o en Ponferrada.

Se trata de decidir entre lo público y lo privado, entre la socialdemocracia o el implacable liberalismo, entre la decencia o la corrupción, entre el reconocimiento transversal de la relevancia del papel de la mujer o el machismo más casposo, entre la vertebración territorial desde los territorios o el centralismo absorbente, entre las personas o los mercados, entre el contrato generacional o el salvaje cortoplacismo, entre la complicidad con las personas  dependientes o el olvido institucional de los mismos, entre las armas de la razón o la razón de las armas, entre el crecimiento en derechos o libertades o la involución.

Por lo tanto, ¡a trabajar todos y todas por nuestro Bierzo! ¡A trabajar por que el PSOE lleve las riendas. Tenemos que hacer que pase! ¡Hagamos que pase!

* Olegario Ramón Fernández es portavoz del PSOE en el Ayuntamiento y candidato a la alcaldía de Ponferrada