[TRIBUNA] La izquierda es otra cosa Imprimir
Sábado 19 de Enero de 2019 12:04

GONZALO GARCÍA | Cuando se hacen trampas o artimañas en los procesos internos de los partidos de izquierdas, la decepción en la afiliación y simpatizantes en estas organizaciones, y en la ciudadanía en general, es tremenda. Se genera tal daño, que puede llegar a ser incurable. El futuro es incierto.

"La mejor jugada del diablo fue convencer al mundo de que no existía".(Sospechosos habituales).

Antes de continuar con este escrito de opinión, cuento, historia, ¡o qué sé yo!, para no hacerlo en las siguientes líneas quiero ahora decir lo siguiente:   Lo ocurrido en la elección del candidato de IU a la alcaldía de Ponferrada es un menosprecio total y absoluto a la izquierda. Los hechos os delatan. Ahora sigo.
Las organizaciones de izquierda vendemos procesos abiertos, de participación, en definitiva procesos democráticos en toda regla. Pero claro, a alguno a alguna les da igual, el tema es ocupar una silla o un sillón, sea como sea, o  cueste lo que cueste. "Dar cera, pulir cera". (Karate Kid).

Si has ganado con trampas y artimañas. ¿Piensas que a esos y esas que has fastidiado en un solo día,  te van a votar?. Decían los indios americanos: "hombre blanco, poca vista". Con este atropello democrático has pillado a víctimas colaterales, y a los que has pillado son de izquierdas, no de derechas, ni de centro.

Habéis generado un daño tremendo a la izquierda, y solo por un futurible sillón. Por no hacer un proceso de elección claro, limpio, sin limitar la participación con el censo electoral en regla. Pero claro, si utilizamos todas las artimañas posibles…. ¿Qué queda? Los hechos os delatan.

"La esperanza es un error. Si no puedes arreglar lo que está roto, te vuelves loco". (Mad Max).

Luego si se quedan en casa, y no te votan, porque los has cabreado, y asciende la derecha, te echas las manos a la cabeza, culpas a los que se han quedado en casa. “Houston, tenemos un problema”. (Apollo 13)

Qué bueno sería que el proceso electoral se hubiera realizado con toda la normalidad participativa y democrática, y al final, tras el recuento, ganador o ganadora, perdedor o perdedora, saliesen en la misma foto. Eso sería normalidad democrática. Ese debería ser el objetivo de todo proceso electoral.

Por todo lo dicho no se ha conseguido. Y es una gran pena.

Y el futuro sería de otra manera.

 

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