Un grupo de vecinos de La Placa se manifestará para dejar constancia de su malestar por la situación de abandono en que se encuentra, en su opinión, este populoso barrio. Los convocantes consideran que la desatención del equipo de gobierno encabezado por Carlos López Riesco y la falta de inversiones para mejorar las infraestructuras y servicios han llegado ya a una situación insostenible, de ahí el recurso a esta medida de presión. El Grupo Municipal Socialista apoya esta protesta reivindicativa y augura que "puede ser el inicio de otras muchas" porque los barrios y pueblos son "los grandes olvidados" de los presupuestos municipales para 2008.

Los convocantes exigen un plan detallado de inversiones para el barrio y consideran una cortina de humo los anuncios de obras efectuados por el alcalde tras reunirse con "sus amigos" de la asociación de vecinos Carrascal. Este encuentro, señalan, se produjo el día 8 de enero, precisamente poco después de que se hiciera oficial la celebración de la manifestación, anunciada ya por este diario digital el 4 de enero.

La marcha partirá de las 11.00 horas de la Plaza de Castilla de la Placa, continuará por la calle Zaragoza, avenida de la Cemba, avenida de Portugal, avenida de España y desembocará en la plaza de Julio Lazurtegui. Si el tiempo acompaña, continuará hasta la Plaza del Ayuntamiento por la avenida de La Puebla, General Vives y Calle Ancha. "Dado que es previsible que acuda gran número de personas mayores y si llueve con fuerza ese día, evitaremos subir hasta el Ayuntamiento, cortando la Plaza de Julio Lazúrtegui y leyendo en la misma un comunicado", anuncian los convocantes.

Protesta en Cosmos

La comisión territorial de Prevención Ambiental autorizó el 20 de noviembre de 2007 a Cosmos la utilización de diferentes residuos, biomasa (madera, cartón y papel), plásticos, residuos de tratamiento de aguas residuales, harinas y grasas animales y neumáticos fuera de uso, como combustibles alternativos. La autorización se concedió con los límites y condiciones técnicas que se establecen en  el documento de la ponencia, más de una veintena de prescripciones.

Ecologistas en Acción considera que la incineración es la forma más insostenible y peligrosa de tratar los residuos, "puesto que no se eliminan, sólo son trasladados y dispersados, liberando a la atmósfera nuevas sustancias resultantes de la combustión, bien a través de las cenizas o en forma de gases. Son compuestos especialmente preocupantes, debido a sus efectos potenciales sobre la salud humana y el medio ambiente, son los compuestos que contienen azufre, nitrógeno, halógenos como el cloro, y metales tóxicos; y en especial los compuestos: CO, NOx, SOx, ClH, Cadmio, Plomo, Mercurio, Cromo, Arsénico, Berilio, dioxinas y furanos, PCB y PCT e hidrocarburos aromáticos policíclicos".